Para muchos, es la forma perfecta de hervir agua para hacerse un café o un té. Para otros, es un elemento esencial al cocinar, ya que contar con agua caliente de forma rápida es una necesidad. Hay muchos platos que requieren agua caliente y estas máquinas permiten conseguirla mucho antes que calentándola en un cazo.

Al principio, estos hervidores de agua eran sencillos y no incluían apenas funcionalidades adicionales. En la actualidad, constituyen electrodomésticos innovadores y avanzados.

Cómo funciona

La función de un hervidor eléctrico es hervir agua para usarla en la preparación de un té, una manzanilla, un caldo, pasta... y su funcionamiento es realmente sencillo. Básicamente, un hervidor es una jarra con una resistencia eléctrica que, normalmente, está embutida y no queda en contacto con el agua. Al enchufarlo, la resistencia hace hervir el agua y su vapor, al salir, emite un sonido de aviso. En la mayoría, la desconexión es automática. 

Tipos

· Hervidores inalámbricos: la jarra se coloca sobre una base que es la que contiene la resistencia y lleva el cable para conectarla a la red.

· Hervidores con cable: la resistencia está integrada en la propia jarra, que incluye un cable para conectar a la red, habitualmente de quita y pon.

En qué fijarse 

Si has decidido comprar un hervidor, hay algunas cuestiones básicas que debes tener en cuenta y también ciertos detalles del equipamiento que te pueden interesar.

Son las tres características básicas sobre las que debes decidir.

· Material: el hervidor puede ser de plástico, acero inoxidable, cristal... Todos ellos son adecuados, pero lo importante es que no tengan problemas de oxidación en contacto con el agua. El acero inoxidable es duradero y fácil de limpiar, el vidrio te permite ver fácilmente el nivel del agua y el plástico es económico, pero asegúrate de que sea de alta calidad y resistente al calor. También existen modelos de silicona que son plegables, más fáciles de guardar.

· Capacidad: modelos de hasta un litro de capacidad da un buen servicio para hogares de cuatro personas, mientras que los que llegan a los dos litros son perfectos para las reuniones familiares o en una oficina. Debes tener en cuenta que nunca hay que usar el hervidor con el agua por debajo de la señal de mínimo (tampoco con más de la cantidad máxima) por lo que si sueles calentar con frecuencia solo para una taza o 250 ml, no te conviene un hervidor demasiado grande. Puedes considerar incluso un mini hervidor de medio litro de capacidad.

· Potencia: cuanto más potente, menos tardan en llevar el agua a bullición. Lógicamante, existe una relación entre la capacidad y la potencia, pero dentro de los del mismo tamaño, puedes elegir de potencia más alta si quieres que sea rápido. Por ejemplo, los hervidores de un litro de capacidad pueden tener potencias entre 1.500 y 2.000W.

Consejos 

· En el primer uso, hierve agua y tírala para limpiar las posibles impurezas.

· Si te sobra agua que ya has calentado, no es recomendable recalentarla. Mejor tirarla.

· Realiza un proceso de descalcificación cada mes si el agua es dura y cada 3 meses si el agua es blanda.

· No lo mantengas enchufado si no lo estás usando.

En PCWebShop te hemos acercado esta semana a porque un hervidor de agua es un elemento imprescindible en la cocina por diferentes motivos

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