Que no te sea difícil la elección de un teclado para tu PC

Hay mucha variedad en el mercado entre lo que elegir, y para ello esperamos ayudarte con este artículo para que te sirva de orientación a la hora de elegir el que más se acerque a tus necesidades.

Hay cuatro amplias categorías de teclados en función a cómo funcionan sus interruptores, en lo cual incluimos la combinación del interruptor o switch así como la tecla que lleva encima para la actuación u otros elementos.

Los teclados mecánicos son bastante más variados dependiendo del tipo de mecanismo (interruptor o switch) que usen de activación. Este tipo de teclados suelen ser más caros, pero a cambio suelen ser más recomendables para algunos que escriben durante muchas horas, además de que muchos los prefieren por el ruido que hacen, más como las tradicionales máquinas de escribir.

Como otros interruptores, los mecánicos se desgastan con el tiempo y van adquiriendo más resistencia, por ello depende mucho la calidad del propio interruptor, aunque los actuales tienen una vida útil de al menos 50 millones de pulsaciones, con los mejores superando los 100 millones.

Los interruptores ópticos eliminan el problema fundamental de los mecánicos como es el tiempo de rebote. Al tener los mecánicos un sistema físico generalmente con muelle que oscila tras la pulsación, tarda un tiempo en volver a su posición de reposo, tiempo durante el cual por su oscilación podría hacer que se detectaran pulsaciones que no se han hecho.

De ahí que se imponga un tiempo de rebote durante el cual se ignora el interruptor. Eso implica que si el usuario hace dos pulsaciones muy seguidas, una de ellas se pierde. Los ópticos no tienen este problema porque funcionan en base al corte de una barrera de infrarrojos. Tras pulsar este mecanismo, no hay rebote, por lo que el interruptor vuelve al estado de reposo, eliminando esos milisegundos de tiempo de rebote.

La ventaja de estos interruptores está en que al jugar se puede pulsar una tecla todas las veces que se quiera y todo lo seguido que se quiera que el teclado detectará sin problemas todas y cada una de las pulsaciones.

Los teclados más baratos utilizan un tipo de interruptor llamado domo de goma, muchas veces llamados también de membrana si se mira a cómo se detecta la pulsación, aunque no siempre se hace con una membrana. Suelen ser generalmente silenciosos, salvo que se opte por darles una sonoridad similar a los mecánicos, y dan una experiencia de tecleo adecuada a su coste.

La comodidad o no de una tecla proviene del mecanismo que va por debajo, pero también de la propia tecla y el material del que esté hecho. En general variará mucho entre fabricantes, y los de mejor calidad tienen una textura más agradable al tacto. En algunos casos las teclas suelen ser intercambiables, lo que facilita comprar juegos de teclas de tiendas especializadas para dar un toque adicional de personalización.

Los teclados más baratos utilizan pegatinas para situar el rotulado de las teclas, mientras que otros más comúnmente utilizan un grabado láser. Las teclas de mayor calidad usan una técnica de sublimación para insertar la tinta en el plástico del que esté hecha la tecla. La técnica de sublimación de tinta es el más caro pero a su vez el que es más duradero y de mejor tacto al no notarse en absoluto el rotulado.

Es raro que en los teclados modernos se produzcan toques fantasma (ghosting), entendido como que al pulsar dos teclas a la vez el teclado registre que se ha pulsado una tecla totalmente distinta. Para evitar esta situación existe la pulsación multitecla o seguidilla (n-key rollover), y los fabricantes suelen indicar en su defecto cuántas teclas (x-key rollover, seguidilla de x teclas) se pueden pulsar simultáneamente, quedándose todas y cada una de ellas registradas por el teclado.

Los teclados más económicos —como por ejemplo los de domo de goma— implementan habitualmente lo que se conoce como seguidilla o anti toques fantasma (anti-ghosting) que es la protección de ciertas teclas, siendo habitualmente un multitecla de tres teclas (3-key rollover). En realidad en la inmensa mayoría de teclados modernos, como he comentado, no es un problema o algo que haya prestarle excesiva atención.

Los teclados en multitud de factores de forma, aunque se pueden englobar en dos de manera amplia: los extendidos y los compactos. Los extendidos son los que incluyen el habitual teclado numérico, que se puso ahí para utilizar mejor las hojas de cálculo, y los compactos son un cajón de sastre para el resto.

Entre estos compactos hay bastante distinción porque los gamers buscan cosas cada vez más específicas.

Los controles multimedia dedicados son muy útiles, y suelen componerse de una rueda de volumen y de varios botones para reproducir/pausar o avanzar/retroceder de pista. 

Hay teclado especiales que en combinación con esas teclas de macro, añaden un dial y botones adicionales en la parte izquierda por lo que hacen las funciones de consolas de edición integradas, que son muy útiles para usos más profesionales. 

Hay modelos que son a prueba de agua y polvo, aunque normalmente será frente a salpicaduras y a la inserción de residuos de cierto tamaño y no precisamente polvo. Suelen estar combinados con teclados de domo de goma porque facilita aportar esa resistencia al agua.

La iluminación es otro aspecto fundamental para muchos usuarios, sobre todo si no saben mecanografía y gustan de jugar a oscuras, como ocurre con los más jóvenes. 

En PCWebShop te hemos acercado esta semana a que no te sea difícil la elección de un teclado para tu PC

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